L’Aplec del Caragol tiene su origen allá por 1980 cuando un grupo de amigos y conocidos se reunió en la orilla del río Segre para hacer una caracolada allá por 1980. Con el paso de los años se fue consolidando y se crearon collas de diferentes barriadas de la ciudad y se tubo que cambiar de ubicación a los Campos Eliseos por falta de espacio. Actualmente se reúnen en torno a 100 peñas con 12000 peñistas, los cuales comen mas de 12 toneladas de caracoles y el recinto es visitado por 250000 personas del resto del estado.
La fiesta empieza el viernes por la tarde cuando ya se ha terminado de montar las peñas pero oficialmente es inaugurada por el Alcalde sobre las nueve de la noche.
Casi todas las peñas tienen pequeños escenarios donde actúan grupos musicales para amenizar la noche.
Para los mas atrevidos se realizan una serie de concursos en que se premia a sus habilidades para comer y beber lo más rápido posible como el ya conocido concurso cerveza-polvorón-cerveza o el de comer pan de caracol.
Con el buen ambiente y el fuerte calor la gente se va animando a beber cervezas y vino.
Por la tarde, al bajar el sol pudimos encontrar los Castellers de Lleida levantando sus estructuras humanas y dejando asombrados a los turistas.
Ya de noche la gente únicamente tenia un tema de conversación, dejando el calor y la masiva afluencia de público en un segundo término, la final de la Champions que disputarían Barcelona y Manchester United acaparó todas las miradas y el partido se pudo ver en las numerosas pantallas y proyectores ubicados para tal fin.
Con el pitido final la euforia se desató dentro de las peñas por parte de los barcelonistas que ya podían disfrutar de su cuarta Champions. Las celebraciones duraron más bien poco ya que los futboleros no cenaron hasta la finalización del partido y muchos son los que se decantaron por llenar el estómago antes que celebrar el triunfo.
Después de una noche de celebraciones por parte de unos y de juerga por parte de otros, bien temprano los peñistas fueron dirigiéndose hacia el puente viejo, delante de la estatua de Indíbil y Mandoni donde les esperaba el Alcalde de la ciudad, Àngel Ros y algunas autoridades para entregarles unas insignias con motivo de la participación en el Aplec del Caragol 2011 a los capitales de las peñas (los llamados ‘caps de colla’) como se hace año tras año desde sus orígenes.
Los participantes después de recoger su insignia pasan por el puente viejo donde se realizan la típica fotografía con la Seu Vella detrás y se dirigen a sus correspondientes peñas para almorzar un buen chocolate con coca o churros.
Conforme avanza la mañana sube la temperatura pasando de los 30 grados y los más jóvenes aprovechan para realizar juegos con pistolas de agua con el fin de acabar empapados, otros simplemente de dejan de historias y se tiran cubos enteros llenos de agua.
Después de los juegos y de toda la noche de fiesta muchos son los que no lograron aguantar hasta el mediodía y se pudieron ver descansando en cualquier lugar expuestos a las miradas ajenas de los turistas.
De cara al mediodía el recinto acoge el mayor número de visitantes y las calles se encuentran a rebosar. Este año se ha estipulado un total de 250000 visitantes. Para los turistas se habilitaron carpas especiales donde refugiarse del sol y poder degustar la cerveza típica de la ciudad o una muestra de caracoles ‘a la llauna’ en el stand del restaurante del Aplec, Lo Tast.
Mientras tanto en los interiores de las peñas se disponen a colocar los caracoles en las ‘llaunas’ para su posterior elaboración. A cada peñista le corresponde un kilo de caracoles de media para los tres días. Aunque el día oficial para comerlos ‘a la llauna’ es el domingo, muchas peñas los comen a la gourmanda o a la vizcaina acompañados de segundos platos mas consistentes como fideua, conejo con alcachofas, pollo con escamarlanes, ‘chatonada’ con bacalao para que les proporcionen las energías suficientes para poder desmontar las carpas e ir recogiendo y limpiando todo el recinto.
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